

Escondido en el corazón
de un árbol calloso.
Quizá vuele mi mente, aguilucho
sobre la paz, llanura, de tu cuerpo
sobre la profundidad, mar, de tu mirada
Tal vez te encuentre en mi altillo
entre viejas cartas y un muñeco de trapo
a quien abrazaba de noche
cuando los truenos retumbaban mi miedo
Puede que te busque en las cosas puras
en esa flor orgullosa de rocío
que despierta amaneceres
en esa luna caprichosa que me trae tu recuerdo
O en el olor a tiempo de un pueblo
entre rosas secas de mi diario adolescente
en el sabor agridulce de saberme diferente
Buscaré en los pliegues del viento, en los aromas de la tierra, en los colores del mar...
ResponderEliminarY el sueño me llenará de vida
¡Qué bueno César que te inspire búsqueda este encuentro de mis 15 años!
ResponderEliminarUn abrazo sincero.